Secuestro de nueve funcionarios de gobernación del Cauca: 'Son civiles, padres, madres, hijos y hermanos, que solo buscaban servir a las comunidades'

El gobernador del Cauca, Octavio Guzmán, señaló que de los nueve funcionarios secuestrados en zona del municipio de López de Micay, el pasado 17 de julio, siete son mujeres y dos son hombres, recalcando que son civiles, que son padres, madres, hijos y hermanos, cuyas familias están angustiadas y esperan su regreso prontamente.

Añadió que se encontraban en la zona articulando un proceso de diálogo de participación con las juntas de acción comunal.

“Llevaban oferta institucional a comunidades en condición de vulnerabilidad. La institucionalidad no puede ser confundida con la guerra, ni los servidores públicos convertidos en rehenes”, dijo Guzmán.

“Lo ocurrido en López de Micay es una clara violación al Derecho Internacional Humanitario. Los funcionarios y contratistas secuestrados son civiles, padres, madres, hijos, hermanos, que solo buscaban servir a las comunidades más necesitadas del Cauca”, manifestó el mandatario.

Fuentes oficiales confirmaron que las disidencias del autodenominado ‘Estado Mayor Central del Bloque Occidental’, se atribuyeron el hecho.

El grupo ilegal emitió una misiva, diciendo que los funcionarios estarían instalando equipos militares para inhibir señales y derribar drones y señalando que por sus actividades militares fueron secuestrados, mensaje que fue tajantemente rechazado por la gobernación del Cauca, reiterando la misión social que adelantaban los contratistas en López de Micay.

El secuestro habría sido cometido a las 4:00 de la tarde de ese 17 de julio, aunque no se especifica el sitio exacto donde se encontraban.

Las disidencias dijeron que “evaluarán la información contenida en los dispositivos incautados” y que los capturados serán tratados como “prisioneros”.

El gobernador departamental pidió que se les respete la vida a los funcionarios e instó a organismos internacionales a velar por la seguridad de los prisioneros.

“Hacemos un llamado al presidente Gustavo Petro, al ministro del Interior y a la comunidad internacional para rodear esta exigencia humanitaria. La paz se construye con respeto a la vida”, agregó Guzmán.

Los secuestrados son Eivar Alonso Guerrero Anaya, Sergio Andrés López Gómez, Angélica María Barona, Leydi Rocío Guengue, Paola Andrea Maca Chávez, Mónica Alexandra Bambague, Manuela Caicedo Arango, María Elizabeth López y Elizabeth Yangana.

También distintos sectores y ciudadanía rechazaron la retención que cumplía funciones legítimas del Estado.

“El involucramiento de la población civil en el conflicto es una grave violación del Derecho Internacional Humanitario. Los civiles no pueden ser usados como fichas en el tablero de la confrontación armada. Retenerlos, amenazarlos o desaparecerlos no es sólo un crimen: es una afrenta directa contra la vida, la dignidad y el derecho a la paz”, se lee en redes sociales.

“Colombia no puede seguir normalizando esta violencia. El Cauca no puede seguir siendo territorio de sacrificio. Cada vida cuenta. Cada servidor público retenido representa un paso atrás en el camino hacia la reconciliación”, dice otro mensaje escrito por internautas. Entre tanto, las autoridades activaron los protocolos de búsqueda.

MICHEL ROMOLEROUX

Especial para EL TIEMPO 

Popayán